Medio Ambiente de Castilla y León
Medio Ambiente de Castilla y León
Las políticas de transporte han sufrido un cambio importante en los últimos años, teniendo que prestar atención no sólo a la mejora de las infraestructuras y la accesibilidad, la planificación, la congestión y la seguridad, sino también a la reducción de los impactos ocasionados por este sector.
Tal como describe Agencia Europea del Medio Ambiente, el transporte es el responsable de alrededor de un tercio del consumo de energía final, así como el causante de más de un quinto de las emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI) en Europa.
El transporte es el causante, en gran medida, la contaminación urbana y las molestias ocasionadas por el ruido. Sin olvidar el impacto del transporte en el paisaje debido a que las infraestructuras que lo sustentan dividen zonas naturales, con graves consecuencias para los ecosistemas y la biodiversidad que albergan.
La Estrategia Europea de Desarrollo Sostenible, revisada en 2006, establece el Transporte Sostenible como uno de los temas prioritarios. El objetivo principal consiste en conseguir que los sistemas de transporte de la Unión Europea satisfagan las necesidades económicas, sociales y ambientales de la sociedad, a la vez que se minimizan sus impactos indeseables en todos los ámbitos.
Este ambicioso objetivo requiere un enfoque integrado, que las medidas e instrumentos políticos a poner en marcha no se queden exclusivamente en el sector del transporte como tal, sino que tengan en cuenta las interacciones con otros sectores: los que lo generan, principalmente el industrial, servicios y vivienda y los que lo sustentan: ordenación del territorio y planificación urbana.
En Castilla y León, se han elaborado dos estrategias complementarias, para abordar los retos que la movilidad sostenible plantea e intentar conseguir el equilibrio necesario entre la conservación del medio ambiente y de los recursos naturales y el modelo socioeconómico:
